Anoche fui al cine a ver la última película de Dolores Payás, "MEJOR que NUNCA", protagonizada por Victoria Abril: Una película sobre las mujeres en el periodo de los acaloramientos.
Cuando la presentaron a pie de pantalla, y ya que hablamos de pie, Victoria Abril, haciendo gala del gran dominio que tiene de la escena, nos contó cómo se había roto un pie, que llevaba de esa guisa; supongo que lo haría para romper el hielo, ya que la comedia estaba contada en clave de comedia. Difícil clave para contar algo, por lo fácil que es no llegar o pasarte.
Digo esto, porque estoy seguro que a muchos espectadores les puede llegar a chirriar lo que en realidad puede que sea el gran hallazgo de Dolo –su nombre de estar por casa- en esta película, al atreverse a sobrepasar lo “políticamente correcto” y meterse en el terreno puro de la innovación –creación-, ya que se permite usar no sólo una clave de humor, sino dos para contar su película: Por una parte emplea unas maneras elegantes, muy acordes con el refinamiento personal de la cineasta, y por otra unas formas más chabacanas en sintonía con el personaje que trata: ejemplo de esto último es como nos dibuja al portero de la vivienda de la protagonista, del que no voy a dar más datos para no fastidiar a quien quiera ver la obra.
La película está narrada desde una perspectiva de mujer e interpretada –en los papeles femeninos, como es natural- desde el mismo prisma: o sea que, ¡ríase usted de los hombres que se meten en ese insondable mundo, para los que fumamos puros en el fútbol.
Se podrían decir muchas más cosas, pero como la película emprende su camino ahora, es mejor que cada cual saque sus propias conclusiones.
Película recomendable para las mujeres con sofoquinas, las que las tuvieron, las que las tendrán... y para los caballeros, por si nos abre alguna puerta a ese extraño mundo de las féminas.
NOTA: Espero no haber sido muy parcial; aunque, si lo he sido no me importa mucho: Dolo es una persona muy entrañable y se merece hasta el pecado de esa hipotética parcialidad .
Cuando la presentaron a pie de pantalla, y ya que hablamos de pie, Victoria Abril, haciendo gala del gran dominio que tiene de la escena, nos contó cómo se había roto un pie, que llevaba de esa guisa; supongo que lo haría para romper el hielo, ya que la comedia estaba contada en clave de comedia. Difícil clave para contar algo, por lo fácil que es no llegar o pasarte.
Digo esto, porque estoy seguro que a muchos espectadores les puede llegar a chirriar lo que en realidad puede que sea el gran hallazgo de Dolo –su nombre de estar por casa- en esta película, al atreverse a sobrepasar lo “políticamente correcto” y meterse en el terreno puro de la innovación –creación-, ya que se permite usar no sólo una clave de humor, sino dos para contar su película: Por una parte emplea unas maneras elegantes, muy acordes con el refinamiento personal de la cineasta, y por otra unas formas más chabacanas en sintonía con el personaje que trata: ejemplo de esto último es como nos dibuja al portero de la vivienda de la protagonista, del que no voy a dar más datos para no fastidiar a quien quiera ver la obra.
La película está narrada desde una perspectiva de mujer e interpretada –en los papeles femeninos, como es natural- desde el mismo prisma: o sea que, ¡ríase usted de los hombres que se meten en ese insondable mundo, para los que fumamos puros en el fútbol.
Se podrían decir muchas más cosas, pero como la película emprende su camino ahora, es mejor que cada cual saque sus propias conclusiones.
Película recomendable para las mujeres con sofoquinas, las que las tuvieron, las que las tendrán... y para los caballeros, por si nos abre alguna puerta a ese extraño mundo de las féminas.
NOTA: Espero no haber sido muy parcial; aunque, si lo he sido no me importa mucho: Dolo es una persona muy entrañable y se merece hasta el pecado de esa hipotética parcialidad .
16 comentarios:
Aunque no puedo con Victoria Abril, igual hasta hago un esfuerzo por la recomendación (y porque los calores no me andan lejos).
Siempre desconecta uno cuando se da un pase de cine.
Pues nada, que hasta aquí he llegado, y me gusta, así que ya sabes, asomaré las narices a menudo.
Un abrazo!
¿Qué le pasa al portero?
Me gusta que hagas una entrada sobre el cine español. Yo soy fan nº1 del spanish cinema. Victoria Abril en persona parece un petardo de señora, encantada de conocerse, pero como actriz me encanta. Dolo me tiene como espectadora desde ya.
No respondas a "anónimo" y destripes la peliiiiiiiiiiiiiii...
Besitossssssss.
(¡¡Hola Inga Luv!!!)
Tomo nota, que el miércoles voy al cine pero ya tenemos una en mente para ver: Revolutionary Road.
Anoche estuve al Teatro a ver Jesucristo Superstar, me encantó, espectacular el montaje y las luces, por supuesto los actores también. Judas que es Luis Amando, muy bien. En fin, que disfruté mucho.
Gracias por la recomendación y la veré, por supuesto.
Sinceramente, Inga Luv, yo tampoco soy lo que se dice un fa de Victoria Abril, pero he de decir que, la verdad es que en ésta me ha gustado, no sé si porque prefiero la aruga al maquillaje. Una aruga también en la interpretación: más matizada por los pliegues de la vida y, a la vez,más natural.
Sé que soy bastante parcial a la hora de hablar de lo que hace la gente a la que aprecio; pero no creo que en este caso sea la pasión lo que me haga hablar bien de la interpretación de Victoria, porque, si en este caso conozco a la directora, en otra película conocía, porque era un compañero de estudios, al productor, y no me gustó nada, a pesar de que él estaba fascinado con su interpretación, pues, según decía, todas las tomas ella las hacía diferentes y todas bien.
Gracias por entrar, y muchas más si vuelves.
El portero, Anónimo, en un símbolo en sí, que, por ser como es, está tratado de una manera muy paticular, como en una especie de paréntesis, aunque no es el único con tratamiento propio... como un obsesivo descerebrado. Y no digo más.
Tortu (la tortuosa), esa misma percepción de Victoria Abril tenía yo, pero, no sé si por ser una buena actriz, la verdad es que el otro día, antes y después de la proyección, en el vestíbulo del cine, no daba esa imagen; o quizá fuese por los años que todo lo pulen.
Hasta me preocupa que a estas alturas me pueda convertir en un fan suyo, ya que a raiz de la peli, me metí en su página oficial, y hasta me gustó, bastante, cómo canta, que no la había escuchado nunca.
Pues una recomendación más, Shikila: Cuidadito con los personajes en los que te fijas, que de ese tal Judas, no sé si vas a sacar cosa buena.
O sea, que para saber que le pasa al portero tedría que ir a ver la peli.
Jope!
mi me gustan que me lo digan todo, todito todo, y luego me planteo de ir o no, que no estoy para perder el tiempoooo.
Mas cositas por favor.
Anónimo, es que cada cual tiene que sacar sus propias conclusiones. Es el juego en las artes. De todas maneras, lo que simboliza el portero está más o menos claro; lo que me pareció novedoso es que Dolo le diese un tratamiento concreto y diferenciado de otros personajes; un camino explorable, diría yo.
Muy, Me estas dejando en ascuas
...mmm.. que le pasa al portero, que hace un portero..a parte de guardar la puerta y limpiarla.
Si el protagonismo de la peli es 'el calor' bueno, el sofoco.
¿te dejo en ascuas, Anónimo?... Pues cuidado con las sofoquinas que esas ascuas te puedan suscitar.
El portero, como tal, tiene sus cometidos, pero eso no impide que se le pueda tomar como un símbolo, como una metáfora de algo.
Pues no opino , reconozco que el cine español , me lo tengo prohibido , salvo algunas excepcion , Vicente Aranda y algo de Diaz Yanes , quizas Medem ....esta señorita la abril , aunque pedantosa es muy buena actriz .....
Yo, por mi gusto, doña Peggy, me prohibiría el español y el otro; a excepción de gran parte del que se hizo desde sus inicios hasta alá por los '50 ó 60 y alguna horrosa excepción. Actualmente Siempre suelo ir a regañadientes y "obligado" por terceros; aunquehe de reconocer que de vez en cuando la liebre salta.
Bueno, ya me enterado lo del portero, más o menos y dice así (jojo):
“barretineros” en palabras de Isabel- en lo que realmente son:
mediocres que se miran el ombligo y pretenden imponer cual portero de finca lo que debemos o no hacer, con nuestra basura o con nuestra vida, diciéndonos quien pasa y quien no…
Al final siempre son los que llaman a los “Mossos d’escuadra” para que nos detengan o nos multen. Por cierto, portentosa parodia de nuestras fuerzas de seguridad, obsesionados con detener a todo “quisqui” por resistencia o agresión a la autoridad.. finalmente, tremenda la “mossa” que hace soplar y soplar y soplar a Isabel/Victoria.
Lastima que finalizada la comedia a la salida del cine nos encontramos la dura realidad de la inmersión en la ficción tópica de lo políticamente correcto.
Querida Dolores vas a herir sensibilidades puritanas entre las feministas, progres y nacionalistas. Espero que el humor relaje las mandíbulas y las mentes. El humor puede ser revolucionario. "
A.
Bueno, A., ya has desvelado más de lo que yo hice. Sí, es una comedia con pinta de comedieta sin más, pero con cargas de profundidad de mala leche. Capaz de que se le cuele a mucha gente, como el agua entre los dedos. Precisamente por eso no quería dar datos precisos, porque es bonito ver la lectura que hace cada espectador.
Saludos.
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