domingo, 26 de agosto de 2012

UN PEQUENÍSIMO "GRAN DEBATE"


Sin duda el título del programa que conduce Jordi González, “El Gran Debate”, hace más honor a la amplia franja horaria que ocupa, que a la grandeza cualitativa del mismo. Nada nuevo sobre la Tierra. Después de que tuvo que darle un giro drástico a su programa, “La Noria”, tras haber perdido la cuenta de sus principales anunciantes, ya que se le pasó la tuerca de su zafia populachería, ahora nos ataca con este nuevo, para el que no creo que esté a la altura de sus pretensiones.
Un aprueba de su falta de altura intelectual la hemos podido apreciar hoy, cuando al tratar el caso de la viejecita Cecilia de un pueblo aragonés, Borja, que, al pretender restaurar el “Ecce Homo” de su iglesia, seguramente con mejor buena voluntad que pericia, ha hecho un bodrio que ha dado la vuelta al mundo de la mano de los principales medios de comunicación.  Y claro, en estas, tanto Jordi como sus colaboradores en ese momento (Antón Losada, Elisa Beni, Isabel Durán y Jaime González), a pesar de ser de tendencias ideológicas bastante poco afines, todos han coincidido en alabar la imprudencia de la anciana, porque claro, tú, les ha venido el buenismo ese de “mira tú, con la buena voluntad que lo ha hecho la ancianita y…”. Pues, hale, a animar a todo quisqe a que se ponga manos a la obra de la no restauración, y ya veremos qué dicen estos insensatos, cuando el viejecito/a de turno “apañe” un velázquez o un goya, pongamos por caso.
El caso es que se ha producido el milagro por el que ese ramillete de periodistas, por una vez y sin que sirva de precedente, han estado de acuerdo en esa soberana sandez… otra cosa ha sido cuando, a continuación, se han metido a debatir sobre los “asaltos” a supermercados. Entonces cada uno ha cogido el papel a que nos tienen acostumbrados; mostrándose cada cual de lo más sensato en la defensa de sus posiciones y “jefes” de siempre; cosa que, sorprendentemente, siempre hacen, independientemente de lo que se debata.
Y esos supuestamente deben de ser la flor y nata del periodismo nacional… aunque personalmente me han parecido unos insensatos y unos catetos intelectuales.

martes, 21 de agosto de 2012

sábado, 18 de agosto de 2012

EL BAÚL DE LOS RECUERDOS

Ayer, como si fuese la mismísima Karina, estuve hurgando en el baúl de los recuerdos y me encontré con este dibujo, que ya ni recuerdo cuándo lo hice ni para qué. El parecido físico de la mujer que aparece en el dibujo con una política, con la que, hace unos años,  me relacioné bastante, sobre todo a través de una fundación de la que ella se hacía cargo y yo colaboraba, me hace suponer que se trata de ella, una mujer de mucho carácter de la que obviaré su nombre, por razones fáciles de suponer.
Es curioso que, precisamente ayer, después de tantos años, me encontrase este dibujo.

Aunque, no sé por qué, esta política negaba sistemáticamente tener vínculo alguno con un conocido meublé de Barcelona, ni con otros establecimientos hosteleros de semejantes características repartidos por la Costa Brava, lo cierto es que sí tenía algo que ver.
 Y, repito, no sé por qué lo negaba, ya que allí sólo se ofrecía la oportunidad de que cualquier pareja, “ella con la compra y usted con el periódico desayunaban incierto amor… … quizá porque el amor furtivo tiene ojos de amigo y pluma de poeta”, se entregasen a la principal función del ser humano y del resto de los animales. Bueno, he de reconocer –así somos la especie humana- que las prácticas que allí se llevaban a cabo, incomprensiblemente tenían y siguen teniendo mala prensa. Y vuelvo a repetir: no sé por qué lo negaba, si es una mujer progresista que debería de estar, y lo está, por encima de cosas tan de otro tiempo.
Que estas cosas las vean con malos ojos otros, a pesar de que ellos las lleven a cabo… eso es otra cosa.
Pero, lo que son las cosas, ayer, desde mi olvido apareció esta caricatura: precisamente ayer.
Sí, precisamente ayer que erradicaban totalmente, y por ley, la prostitución de las calles de Barcelona… que lo hagan quienes se pasan sus vidas meando pilas en público, aunque en privado hagan lo que cualquier hijo de vecino, debería de llamar la atención, pero a estas alturas… ¡a estas alturas”…. Lo malo es que lo hacen, pero con la complicidad y aquiescencia de los compañeros de partido de la política aquí aludida.  
Y es que ahora se ha puesto de moda tratar a las prostitutas de esclavas sexuales, como si ser esclavas de quitar mierda ajena no fuese igual de bueno o de malo, según las tragaderas de cada cual. (Naturalmente con todo esto no quiero defender ni el proxenetismo a escala personal ni el de las mafias organizadas, que me parece absolutamente punible).
El caso es que en esto quienes parecían llevar la voz cantante eran los partidos conservadores, pero como ahora la única libertad que parece merecedora de se salvaguardarse es la de mercado, los de la otra parte, los que se llaman progresistas, parece que se han olvidado de la defensa de la libertad que hasta hace unos años reivindicaban. Lo siento, pero uno que no es homosexual ha estado en la defensa de los homosexuales y, sin ser un putero, se mantiene en ese colectivo tan débil de la sociedad que son las putas. Otro gallo les cantara si fuesen capaces de unirse y juntas poner con el culo al aire a su distinguida clientela, esa que ahora les niega el pan.