¡LA QUE NOS ESPERA!
La campaña de Navidad y Reyes, este año, va a ser un dislate; ya lo digo. Tan disparatada en la confusión como en lo dilatada: Terminaremos, sin duda, confundiendo Nancy con Teresita, no sólo por el peso; a Madelman con Más, no sólo por la barbilla; a Pepín con Pepito o por su inseparable, cuando están juntos; a José Luís, el popular antipopular con Josep Lluís, aquí en la China Popular (中華人民共和國-中华人民共和国) o en la otra, etc.
Lo malo es que, las cosas han tomado esos rumbos y no parece que quieran cambiar, desde que los hechos nos han venido a demostrar que somos seres escasamente evolucionados –cosa que ya hemos medio aceptado, aunque sea a regañadientes- y aunque sabemos que unos abalorios de cuentas de colores no son tan distintos de esas lucecitas sobre el recuadro negro que nos machaca o esos coloritos sobre los recuadros blancos que también nos machacan o que esas estridencias acústicas con un grado de semejanza hipnótica a la flauta del de Hamelín, seguimos esos dictámenes, como si fuesen modas oficializadas Y ellos lo saben; lo saben, lo aplican y les rinde.
Recientemente, todavía no sé si es oficial, han empezado sendas campañas y uno tiene –con uno o mil perdones, pero con literalidad- la picha hecha un lío: ya no sabe si determinado perfume lo firma el Gobierno de España –Gobierno del Estado, para otros- o si Chávez, devenido en Rey Negro, dejará de intentar traernos la negra, con pretensión de futuro, o si la más famosa de las ministras va a agenciarse una llana, o ya na’.
Ya –hasta me parece oír el “fum, fum, fum"- en la primera página de algún diario nos encontramos, en ese patio de colegio que algunos se empeñan en llamar “Congreso de los Diputados” –¡válgame la Macarena!- los primeros esbozos de eslóganes para la temporada de los que no saben hacer otra cosa... como si su cara, que parece un anuncio, no les bastara.
Esto no ha hecho más que empezar y se promete largo y chungo, pues este año se nos junta la campaña –publicitaria- de Navidad y Reyes con la campaña –publicitaria, sin más- de las Elecciones Generales.
¡LA QUE NOS ESPERA!
2 comentarios:
Más de uno le estará pidiendo a los hados -más que a los reyes, que éstos últimamente visitan a menudo a piro- que les sean favorables los meses venideros, pero por si acaso, y como a Dios rogando y con el mazo dando, van rapartiendo a troche y moche, a los de a pié y a los responsables de determinados partidos necesarios para posibles alianzas.
Ahí le has da'o, Ángel: ¡PERO ES QUE VAN COMO LOCOS!
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