Muchos son los púgiles a los que se les ha allanado la carrera a base de enfrentarles a auténticos marmolillos: Primo Carnera, el gigante que cayó a los pies de Max Baer (11 asaltos) primero y luego de Joe Louis (6 asaltos), cuando estos se negaran a hacer tongo, podría ser quizá el caso más destacado a escala mundial, máxime porque se reflejó en una película, la última protagonizada por Humphey Bogart y dirigida por Mark Robson, “Más Dura Será la Caída”. Aquí, a nivel local, dentro de nuestras fronteras, quizá el caso más destacado fue el de “El Morrosco de Cestona”, José Manuel Ibar “Urtain”, al que en la fase inicial de su carrera, los contrincantes le duraban escasos segundos.
Como sucede a veces en el boxeo, donde en base a una aparente fortaleza –o real, pero sin habilidad- se da gato por liebre, en la política, suele ocurrir otro tanto y nos podemos encontrar a gentes a las que se les aupa más por el aspecto físico que por su valía real: ojos azulbambi o sonrisas falsamente panorámicas, nos las quieren hacer tragar, como qué sé yo; pero que al final cuela. Verbigracia, sin gracia.
El que viste y calza –que de raza le viene al galgo-, desabrido hasta para no poder hacer un caldo con su médula, ha tocado todas las teclas, sin afinar con ninguna, se le han crecido los enanos propios y ajenos, con resultado de desbarajuste total. Y el dale que dale: si no mete goles... pues echa las pelotas a procelosos confines y tan serio: que la panorámica, ha terminado encogiéndosele.
Pero bueno, todo sea para generar empleo, que voceros no le faltan y si le faltan, ahí estamos nosotros: los de a pie. Con razón a periodistas de su cuerda, como Enric Sopena, no les queda un pelo que no sea cana, ni una bala en la canana.
Es un caso tan singular, que antes de retirarse, y, por tanto, de que tenga sucesores, le podríamos otorgar el título de “El peor presidente de la Historia”; lo malo es que si sigue imbatido, es porque a alguien le deberíamos dar el nombramiento de “El peor oponente de la Historia”.
Como sucede a veces en el boxeo, donde en base a una aparente fortaleza –o real, pero sin habilidad- se da gato por liebre, en la política, suele ocurrir otro tanto y nos podemos encontrar a gentes a las que se les aupa más por el aspecto físico que por su valía real: ojos azulbambi o sonrisas falsamente panorámicas, nos las quieren hacer tragar, como qué sé yo; pero que al final cuela. Verbigracia, sin gracia.
El que viste y calza –que de raza le viene al galgo-, desabrido hasta para no poder hacer un caldo con su médula, ha tocado todas las teclas, sin afinar con ninguna, se le han crecido los enanos propios y ajenos, con resultado de desbarajuste total. Y el dale que dale: si no mete goles... pues echa las pelotas a procelosos confines y tan serio: que la panorámica, ha terminado encogiéndosele.
Pero bueno, todo sea para generar empleo, que voceros no le faltan y si le faltan, ahí estamos nosotros: los de a pie. Con razón a periodistas de su cuerda, como Enric Sopena, no les queda un pelo que no sea cana, ni una bala en la canana.
Es un caso tan singular, que antes de retirarse, y, por tanto, de que tenga sucesores, le podríamos otorgar el título de “El peor presidente de la Historia”; lo malo es que si sigue imbatido, es porque a alguien le deberíamos dar el nombramiento de “El peor oponente de la Historia”.
10 comentarios:
Lo de ojos "azulbambi" me ha llegado, buenísimo.
Yo a ZP le veo una mala cara al pobre en esta ilustración... Además se ha quedado muy delgado ¿eh? Por cierto, siempre me pasa lo mismo, en vez de "voceros" he leído "poceros", inconscientemente claro está, ¿por qué será?
Ja, ja, ja... es que de todo hay en la vila del señor (no he puesto "Señor", que conste.
Pues mira por dónde, me sale a colación, por lo del Sopena y sus canas:
Fabio, las esperanzas cortesanas
prisiones son do el ambicioso muere
y donde al más activo nacen canas;
Pues ya peina canas Sopena, ya...
Ángel, qué arte tienes, nos sacas unos versos de cualquier cosa :-)
Beso
Sin duda, está contra las cuerdas, pero verás como encuentra el modo de escurrir el bulto entre ellas.
Un abrazo
El arte lo tiene muyseño...con sus estupendas entradas. Y vosotras que mantenéis unos blogs maravillosos. Un placer, en serio.
Ay, Ángel, con las ganas creo que se quedó el autor de esa epístola, de enmendar la plana a los políticos o al poder. Esperemos -siguiendo al otro maestro- que crezcan canas a las calaveras, en lugar de las calvas pronosticadas; pero canas de verdad.
¿Que si es sorprendente el tal Ángel,Tortu?... Ya te digo... y como es persona inteligente, que no luce sino reluce, pues aún más.
Sí, Shiki: ya me gustaría a mí salirme de las cuerdas de un malévico virus informático, como se saldrá este púgil del aire o la niebla.
Nada, nada, Ángel, que tu blog tampoco es manco... el de las niñas, tampoco.
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