sábado, 24 de mayo de 2008

BURRO-HOMBRE

2 comentarios:

Mª Rosa Rodríguez Palomar dijo...

El se lo pierde. Conocer (lugares, gentes, culturas, maneras de cocinar el pollo...)es el secreto de este viaje de la vida.

MUY SEÑORES MÍOS dijo...

Sabias palabras: ¡Qué sería de nosotros sin poder cocinar le pollo hasta en plan Adriá.

Pero este engendro, si se pierde algo es por ser lo que es y, encima, estar pagado de ello...