lunes, 17 de diciembre de 2007

LOS CULPABLES DE LA MALA EDUCACIÓN


CON LA ESPADA BIEN AFILADA

Me ha llegado por correo electrónico un artículo que me dicen ha publicado en El Semanal Arturo Pérez-Reverte. Me ha parecido muy oportuno, pues alguien tiene que decir la verdad de lo que está pasando y si es una persona de prestigio –ya sé que no entre todos-, mejor que mejor.

Como no he conseguido encontrarlo en Internet, para establecer un vínculo con él, lo copiaré y pegaré, por si os interesa:

PERMITIDME TUTEAROS, IMBECILES

Cuadrilla de golfos apandadores, unos y otros. Refraneros casticistas analfabetos de la derecha. Demagogos iletrados de la izquierda. Presidente de este Gobierno. Ex presidente del otro. Jefe de la patética oposición. Secretarios generales de partidos nacionales o de partidos autonómicos. Ministros y ex ministros -aquí matizaré ministros y ministras- de Educación y Cultura. Consejeros varios. Etcétera. No quiero que acabe el mes sin mentaros -el tuteo es deliberado- a la madre. Y me refiero a la madre de todos cuantos habéis tenido en vuestras manos infames la enseñanza pública en los últimos veinte o treinta años. De cuantos hacéis posible que este autocomplaciente país de mierda sea un país de más mierda todavía. De vosotros, torpes irresponsables, que extirpasteis de las aulas el latín, el griego, la Historia, la Literatura, la Geografía, el análisis inteligente, la capacidad de leer y por tanto de comprender el mundo, ciencias incluidas. De quienes, por incompetencia y desvergüenza, sois culpables de que España figure entre los países más incultos de Europa, nuestros jóvenes carezcan de comprensión lectora, los colegios privados se distancien cada vez más de los públicos en calidad de enseñanza, y los alumnos estén por debajo de la media en todas las materias evaluadas.

Pero lo peor no es eso. Lo que me hace hervir la sangre es vuestra arrogante impunidad, vuestra ausencia de autocrítica y vuestra cateta contumacia. Aquí, como de costumbre, nadie asume la culpa de nada. Hace menos de un mes, al publicarse los desoladores datos del informe Pisa 2006, a los meapilas del Pepé les faltó tiempo para echar la culpa de todo a la Logse de Maravall y Solana -que, es cierto, deberían ser ahorcados tras un juicio de Nuremberg cultural-, pasando por alto que durante dos legislaturas, o sea, ocho años de posterior gobierno, el amigo Ansar y sus secuaces se estuvieron tocando literalmente la flor en materia de Educación, destrozando la enseñanza pública en beneficio de la privada y permitiendo, a cambio de pasteleo electoral, que cada cacique de pueblo hiciera su negocio en diecisiete sistemas educativos distintos, ajenos unos a otros, con efectos devastadores en el País Vasco y Cataluña. Y en cuanto al Pesoe que ahora nos conduce a la Arcadia feliz, ahí están las reacciones oficiales, con una consejera de Educación de la Junta de Andalucía, por ejemplo, que tras veinte años de gobierno ininterrumpido en su feudo, donde la cultura roza el subdesarrollo, tiene la desfachatez de cargarle el muerto al <>. O una ministra de Educación, la señora Cabrera, capaz de afirmar impávida que los datos están fuera de contexto, que los alumnos españoles funcionan de maravilla, que <> y que éste no ha fracasado porque <>, entre ellos el de que <>. Con dos cojones.

Pero lo mejor ha sido lo tuyo, presidente -recuérdame que te lo comente la próxima vez que vayas a hacerte una foto a la Real Academia Española-. Deslumbrante, lo juro, eso de que <>, aunque tampoco estuvo mal lo de <>. Dicho de otro modo, lumbrera: que después de dos mil años de Hispania grecorromana, de Quintiliano a Miguel Delibes pasando por Cervantes, Quevedo, Galdós, Clarín o Machado, la gente buena, la culta, la preparada, la que por fin va a sacar a España del hoyo, vendrá en los próximos años, al fin, gracias a futuros padres felizmente formados por tus ministros y ministras, tus Loes, tus educaciones para la ciudadanía, tu género y génera, tus pedagogos cantamañanas, tu falta de autoridad en las aulas, tu igualitarismo escolar en la mediocridad y falta de incentivo al esfuerzo, tus universitarios apáticos y tus alumnos de cuatro suspensos y tira p'alante. Pues la culpa de que ahora la cosa ande chunga, la causa de tanto disparate, descoordinación, confusión y agrafía, no la tenéis los políticos culturalmente planos. Niet. La tiene el bajo rendimiento educativo de Ortega y Gasset, Unamuno, Cajal, Menéndez Pidal, Manuel Seco, Julián Marías o Gregorio Salvador, o el de la gente que estudió bajo el franquismo: Juan Marsé, Muñoz Molina, Carmen Iglesias, José Manuel Sánchez Ron, Ignacio Bosque, Margarita Salas, Luis Mateo Díez, Álvaro Pombo, Francisco Rico y algunos otros analfabetos, padres o no, entre los que generacionalmente me incluyo.

Qué miedo me dais algunos, rediós. En serio. Cuánto más peligro tiene un imbécil que un malvado.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Que suerte que alguien diga tan claro y tan valiente lo que pensamos muchos.

Este es un pais de cobardes...Que permiten que adoctrinen a sus hijos para la causa nacionalista y marxista
y calladitos no sea que este gobierno se enfaden.

MUY SEÑORES MÍOS dijo...

Y qué mala suerte que los demás, por desidia, por cobardía o por incapacidad no hagamos algo parecido. Un poco que tirase del carro cada uno de nosotros en ese sentido, no harían falta partidos nuevos para representarnos: Efectivamente somos unos cobardes en un país de cobardes.

Y lo que realmente más me gusta de Pérez-Reverte es que arremete cotra todo aquel que piensa que es culpable, independientemente del grupo al que pertenezca. ¿Se puede uno imaginar a Enric Sopena o/y consorte,a Jiménez Losantos, a Mª Antonia Iglesias, a Cristina López Schlichting o a tantos otros, repartiendo para todas partes?

A. Sánchez dijo...

Es un alatriste de la pluma, sí señor, no da estocada sin sangre, igual que su personaje literario...

MUY SEÑORES MÍOS dijo...

Ay, esos murcianicos...

Anónimo dijo...

Muyyy gúenoooo.