lunes, 11 de agosto de 2008

¡TOMA, BALANZAS COMERCIALES!


¿ESTAMOS ANTE EL PRINCIPIO DEL FIN DE LOS NACIONALISMOS?
¡Cómo cambian las cosas! Mientras las cosas tienen que ver con la política –es decir, del dinerito del vecino del quinto, el mío y el de usted- aquí no pasa nada; sobre todo si el vecino del quinto, usted y yo no decimos ni mú. Pero, ¡ay!, cuando quienes ponen la “pasta” son gente que entiende de la “pasta” y de sus “balanzas”: ¿Que queréis “balanzas”? Pues tomad “balanzas” (aunque éstas no sean las que tanto pedíais): Sólo los alemanes –que son a quien en estos momentos más quieren tocar los “orchis”-generan una facturación de 60.000 millones de euros, que si no me descuento con tanto cero, serían unos 10 billones de pesetas.

Pero además advierten: ojito, que aunque en Cataluña y Baleares tenemos una buena implantación de empresas, como nos sigáis tocando lo antes dicho, nos podemos dar el bote a otras partes de España menos conflictivas o a otras partes de los 80 países en que ya estamos o a otros nuevos, que cambiar todo el sistema para satisfacer a los 13 “Joves per la Llengua” -y alguno más, quiero suponer- que se manifestaron en el aeropuerto de Mallorca, no nos merece la pena.

En fin, que ya pueden tomar nota los que comen caro y enchufan hermanísimos, y los que se les asemejan, que dejen tranquila la lengua o que, en su lugar, encuentren un lugar apropiado para meter su lengua –la propia de verdad- en el lugar de su anatomía que les cuadre.

Peter Moser:

“Desde la Cámara de Comercio Alemana apoyamos los intercambios comerciales entre todas las comunidades autónomas y Alemania, y conocemos los esfuerzos de aquellas por atraer inversiones. Por ello pensamos que las autoridades baleares deberían plantearse los pros y los contras de las políticas lingüísticas que tienen como objetivo restringir el uso del castellano”. (Toda una declaración de principios, junto a otras que también ha manifestado).

2 comentarios:

A. Sánchez dijo...

Veremos si cuando se las tienen que ver con los fuertes se hacen tanto el gallito como cuando lo hacen con los más débiles. Me refiero a que multan al tendero de la esquina, pero, al gigante alemán...

MUY SEÑORES MÍOS dijo...

Hombre, lo que le contestó la Cámara de Comercio Alemana sonaba a advertencia seria, sino a amenaza. Hasta les decían que ya está bien de tanto analfabeto en castellano para ocupar cargos directivos.

El nacionalismo está, a mi juicio, cometiendo ya grandes errores que, más pronto o más tarde terminará pagando: por una parte, apretando demasiado la rosca a los de aquí, con la lengua y, por la otra, querer apretársela a gentes que son un buen sostén para nuestra economía, pero que para la suya -caso de Alemania-. si se ponen demasiado molestos, tienen otras alternativas: unos payasos, en el sentido peyorativo que se le da a esta palabra.